Un nuevo escándalo de corrupción enloda la imagen de la Policía Boliviana. Un efectivo que presta sus servicios en la cárcel de San Sebastián fue aprehendido por vecinos de Colcapirhua el lunes 27 de julio, cuando intentaba voltear la droga que un narcotraficante pretendía entregarle a una mujer que se dedica al microtráfico.
El narco estaba acompañado de un adolescente de 14 años que llevaba casi 4 kilos de cocaína en paquetes tipo ladrillo, en su mochila. La microtraficante llegó al lugar pactado en una vagoneta similar a la que usan los agentes de la FELCN. De ella descendieron varios policías uniformados y armados que fingían un operativo sorpresa, pero que intentaban quedarse con la mercadería ilegal. El traficante pidió auxilio a gritos y los vecinos salieron pensando que se trataba de un atraco. Capturaron a los comercializadores de la droga y a uno de los policías. Los otros agentes volteadores lograron huir.
Ludwin Ledezma, el abogado del traficante, declaró a la Red ATB: “al promediar las 11 de la mañana, a mi cliente pretendieron voltearle casi 4 kilos de droga. Los policías se identificaron como de la FELCN, pero solo se aprehendió al clase Favio S.R. Tenían armas de reglamento y chalecos”. El comandante de la Policía, Luis Aguilar, confirmó la detención del agente y dijo que el mismo aprovechó su día de descanso para cometer el delito utilizando su arma de reglamento y uniformes de la FELCN, junto a dos agentes que lograron darse a la fuga cuando los vecinos salieron a apresarlos. La autoridad instruyó el procesamiento del agente y que se halle a los cómplices.
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