Un grupo de dirigentes a la cabeza del presidente de la Federación Departamental de Juntas Vecinales, Edwin Rosas Urzagaste, bloqueó ayer por la mañana las principales arterias de la ciudad, con el fin de exigir al comandante departamental de la Policía Boliviana, Juan Carlos Dalence Herrera, la firma del convenio que garantice por 9 meses el proyecto de brigadistas barriales, la manifestación culminó con un intento de toma del edificio del Comando.
Los bloqueos de calles iniciaron desde las 7:30 de la mañana, siendo los principales en el puente Bicentenario, rotonda de Moto Méndez, avenida Circunvalación, rotonda La Torre, puente San Martín y rotonda de Fe y Alegría.
Ante los reclamos de los ciudadanos, los movilizados cesaron en la medida de presión y se trasladaron hasta el edificio del Comando Departamental sobre la avenida Víctor Paz Estenssoro, donde un grupo antimotines resguardaba las puertas de la institución.
Los manifestantes se fueron aglomerando en la puerta principal al Comando doblando en número a los policías que poco a poco iban retrocediendo y protegiéndose con los escudos, mientras los vecinos gritaban y hasta empujaban.
Los movilizados trataron de empujar a los policías para ingresar al edificio en un momento tenso que se vivió en la jornada, pero que por fortuna no pasó a mayores, debido que tras orden superior, fue permitido el ingreso de los principales dirigentes para iniciar el diálogo a “puertas cerradas”.
El presidente de la Federación de Juntas Vecinales Fedjuve, Edwin Rosas Urzagaste, indicó que las medidas fueron tomadas a exigencia de los vecinos, quienes en otras oportunidades, de manera “pacífica” solicitaron la firma del convenio para la ejecución del programa de las brigadas.
“Hace un mes que venimos reclamando la firma de convenio de diferentes maneras, lamentablemente el comandante parece no tener la capacidad de dar solución al tema”, dijo tras explicar que Dalence tiene la obligación de atender a la población cuando lo requiera y evitar así la burocracia.
Dalence, estuvo ausente por 9 días de la ciudad de Tarija, debido a los conflictos registrados en Villa Montes. Sin embargo, explicó que debido a que las leyes no permiten una policía paralela a la del verde olivo, tuvo que enviar toda la documentación del programa citado al Comando General en la ciudad de La Paz, estando actualmente a la espera de una respuesta.
Como estaba planificado, luego de una larga reunión a puertas cerradas entre el representante de los uniformados, y los dirigentes de Fedjuve, ambas partes determinaron que volverán este miércoles a mantener conversaciones con la finalidad de dar una solución definitiva al conflicto.
Fejuve Cercado
El secretario de Conflictos de la Federación de Juntas Vecinales de Cercado, Edwin Flores, realizó la solicitud para reunirse con el comandante. Cumpliendo al requerimiento el comandante instaló una reunión con ellos al promediar las 10:00 hasta las 11:30. Flores al salir de la misma, explicó que las condiciones para mejorar la seguridad en la ciudad están dadas, y que existe la predisposición de parte de la autoridad policial, pero reconoció que existen leyes que impiden la firma del convenio.
“Existe la predisposición, mantuvimos una buena conversación y estamos viendo proyectos alternativos al de los brigadistas barriales, como la policía comunal e incluso los voluntarios del Gacip”.
Fedjuve
El presidente de la Federación Departamental de Juntas Vecinales de Tarija, Edwin Rosas, luego de la reunión sostenida con el comandante, confirmó que serían levantadas todas las medidas de presión, esperando que sea concretada la reunión acordada.
Personas con discapacidad
Además de los dirigentes barriales, participaron activamente en los puntos de bloqueo, miembros de la Federación de Personas con Discapacidad, quienes indicaron que su sector forma parte de las brigadas barriales, al ser sus afiliados los encargados de los controles en toda la zona del Casco Viejo de la ciudad.
Comandante
La autoridad no pudo atender a la prensa, pero anteriormente había explicado que no es un capricho de su persona el no querer firmar el convenio institucional para dar pie al proyecto de las brigadas barriales, dependiente de la Gobernación; sino que la misma Constitución prohíbe instalar una policía paralela, razón por la que envió la documentación a instancias superiores donde realicen la evaluación jurídica.
el
dato
Bs 3 millones es el monto designado por la Gobernación para la ejecución en esta gestión del programa que está dentro de los proyectos de seguridad ciudadana.
contexto
El programa de brigadistas barriales inició en la gestión de Mario Cossío Cortéz, al igual que el Plan Empleo Urgente, el Programa Solidario Prosol, entre otros de carácter asistencialista. El programa consiste en la dotación de implemento de seguridad a grupos vecinales para que hagan vigilancia en sus zonas, cuyos integrantes sean remunerados mensualmente.
El programa no obtuvo los resultados esperados, además que transgrede la Constitución que no permite usar dinero del Estado para fuerzas de seguridad que sean paralelas a la Policía Boliviana.
La Gobernación ante la presión social accedió en esta gestión a mantener el programa con un recorte presupuestario de Bs 10 millones a Bs 3 millones, aunque, para su ejecución, requiere del aval de la entidad encargada de velar por la seguridad, que es la Policía. El comandante, Juan Carlos Dalence, al notar la contrariedad entre el proyecto y la norma, se negó a firmar el convenio hasta tener el visto bueno de la superioridad como ocurrió en otras gestiones.
En otras ciudades como El Alto, existen brigadas barriales de seguridad, pero que funcionan con recursos de los mismos vecinos, sólo en Tarija es utilizado para este fin, dinero del Estado.
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