Un condenado que debía estar encerrado en la cárcel de San Sebastián varones de Cochabamba fue sorprendido in fraganti preparando un alijo con 10 kilos de cocaína, dentro de una vivienda particular en la zona sur, en compañía de su esposa y un cómplice. Lo más preocupante del caso es que los policías que debían custodiarlo no informaron de su desaparición a las instancias correspondientes, por lo que fueron arrestados por el fiscal Augusto Villarroel.
El recluso capturado es Jaime Sipe Gutiérrez de 53 años. El hombre tiene dos antecedentes delictivos por tráfico de drogas y ya tiene una sentencia ejecutoriada por delitos de la Ley 1008. Esta sería su tercera reincidencia.
Desde hace un año, el recluso contaba con el permiso de una jueza de Ejecución Penal para salir de la cárcel de 9 de la mañana a 6 y media de la tarde, a vender muebles al frente, en la plaza San Sebastián, pero cumpliendo un requisito indispensable: ir con custodia policial, lo cual, en este caso fue desobedecido.
El 15 de julio, Sipe abandonó la venta de los muebles y, como si fuera un hombre libre, se fue a una casa de la zona sur para traficar droga.
GOBERNADOR SABÍA El abogado Rolando Ramos informó que a las nueve y media de la noche del mismo 15 de julio, cuando se terminó de llamar la lista en el penal de San Sebastián, el jefe de Seguridad se percató de que Jaime Sipe no retornó de la plaza y le avisó vía celular al gobernador del penal, el mayor Edwin M. P. Empero, éste no habría dado la alerta al Comando de la Policía ni a Régimen Penitenciario.
"El mayor convocó a 11 policías a una reunión en su oficina a eso de las 6 y media a 7 de la noche y sólo dejó a un efectivo en la garita del comedor que debía controlar todo", develó Ramos. Este habría sido el momento aprovechado por Jaime Sipa para darse a la fuga.
Extraoficialmente, este diario conoció que las cámaras de vigilancia que son monitoreadas desde la oficina del gobernador de la cárcel no funcionaron, justamente, el 15 de julio.
Mientras tanto, un grupo de Inteligencia de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico (FELCN) que realizaba un seguimiento por la avenida Siglo XX de la zona sur, detectó movimientos sospechosos de tres personas entrando a una vivienda y los sorprendió preparando un alijo con 10 kilos de droga.
CONFESIÓN Al interrogarlos, Jaime Sipe confesó que era un recluso de la cárcel de San Sebastián. El jefe de Inteligencia del grupo llamó al gobernador del penal para verificar la versión y la fuga se hizo pública. El fiscal Augusto Villarroel explicó que la orden judicial de salida para Jaime Sipe es explícita en cuanto a la responsabilidad del gobernador para garantizar el retorno del interno a la cárcel.
“Debía salir con escolta policial, pero no la tenía, señaló el fiscal que ayer ordenó el arresto del gobernador de San Sebastián, el mayor Edwin Rodolfo M.P., el jefe de Seguridad, un subteniente y dos guardias de las garitas, sindicados del delito de favorecimiento de la evasión con fines de tráfico de drogas.
El director de Régimen Penitenciario de Cochabamba, Erwin Sandoval, dijo que Jaime Sipe “se aprovechó de la confianza que le brindaron los policías y de un momento a otro ellos no se percatan que él ya no estaba y el último en enterarse fue el gobernador”. Aunque la autoridad señala que el recluso “abusó de la confianza de los policías, los artículos 59 y 110 de la Ley de Ejecución Penal y Supervisión ordena que el director del penal y los policías deben controlar la correcta custodia de los internos disponiendo las medidas de seguridad convenientes y están prohibidos de abandonar o delegar sus funciones”.
Versiones ligadas a la misma Policía dieron cuenta de que el gobernador de San Sebastián, actualmente aprehendido, cumplió una condena en La Paz en 1998 por el delito de homicidio culposo y se desconoce cómo pudo volver a la institución verde olivo, y sin perder antiguedad.
Creen que cocaína iba al penal
Una de las hipótesis que manejan los investigadores de la FELCN, es que los 10 kilos que Jaime Sipe preparaba en la casa estaban destinados al penal de San Sebastián, para comercializarlos entre los mismos internos en la modalidad de microtráfico.
Para garantizar el ingreso de semejante cantidad de droga a la cárcel, sin embargo, debía contar con la complicidad de los policías y el hecho de que los funcionarios no hayan informado de la fuga de Jaime Sipe, refuerza la hipótesis de que podrían estar implicados en la cadena de microtráfico.
El director de Régimen Penitenciario, Erwin Sandoval, no quiso contemplar esa posibilidad y pidió que las autoridades sean las que investiguen. “Nosotros esperamos que se pueda prestar colaboración al gobernador, al mayor, que en este poco tiempo que lleva al frente lo ha hecho excelente, ha hecho cambios importantes”, lo defendió Sandoval.
Aprehendidos. Cuatro policías y la esposa de Jaime Sipe fueron aprehendidos por orden del fiscal Augusto Villarroel. Permanecían en la FELCC declarando.
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