Seis personas de la Asociación Kanata Integral de Personas con Discapacidad (Akiperdis) iniciaron ayer una huelga de hambre en demanda de un bono mensual de 250 bolivianos en lugar de los 80 que reciben actualmente aquellas que tienen una discapacidad grave o moderada.
La extrema medida comenzó después de 29 días de vigilia en puertas de la Gobernación. Ayer el sector trató de hablar con el presidente Evo Morales, quien llegó para recibir proyectos de los vecinos, pero fueron reprimidos por la Policía, en la avenida Heroínas, frente a la UTOP.
“Nos han pateado, nos han empujado, no nos han permitido acceder al Presidente, él ha entrado a la Gobernación por la avenida Heroínas”, dijo uno de los huelguistas, Alberto Salazar. Posteriormente, las personas con discapacidad bloquearon la céntrica calle.
Entre las personas que han iniciaron la huelga se encuentran dos adultos mayores que tienen hijos con discapacidad mental y física. “Tengo 70 años, mi hijo tiene 35 años y no puede trabajar por si discapacidad mental, cuando yo me muera qué va a ser de él, ésa es mi preocupación, por eso yo pido un bono mensual para mi hijo, porque los 1.000 bolivianos no nos alcanza para cubrir su alimentación y medicamentos”, indicó con lágrimas, Andrés Fábrica.
Otras de las huelguistas es Rogelia Grájeda (33) que está en silla de ruedas y no puede conseguir un trabajo estable para mantener a su hija de seis años. “Yo consigo trabajos temporales, porque la gente no quiere contratar a una persona en silla de ruedas”, indicó.
El sector alista una marcha en silla de ruedas hacia La Paz por el aumento del bono.
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