En el taller se enseñó como cortar el fuego para no generar un incendio, se mostró las diferencias entre un incendio urbano y uno forestal, porque involucra varios aspectos como la distancia, la topografía, por lo que deben tener tratamientos diferentes. Estos aspectos serán difundidos en otras comunidades.
La iniciativa de estos cursos surgió de la Asociación de Citricultores de la comunidad El Nueve. Esta actividad también será realizada en otras porque la autoridad municipal está dispuesta a trabajar con el campesino, al existir un compromiso con ellos y porque existe la instrucción de que los técnicos trabajen con los productores del campo.
Desde la Secretaría de Desarrollo Productivo del Gobierno Municipal se informó que muchas veces la quema de la caña de azúcar para su cosecha se hace de manera irresponsable, lo que genera incendios que afectan a otras propiedades, que muchas veces no están programadas sus cosechas y ponen en apuros a los vecinos.
Se recomendó a los productores cañeros y al personal que trabaja en la cosecha que deben realizar la limpieza de callejones, las brechas corta fuegos, contar con un equipo necesario para la prevención de incendios no programados para no poner en riesgo las viviendas y la integridad física de algunas personas.
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